La otra selva (chapter one)

Enero 17, 2008,
Delicity, lemon pie, Yenny. Imposible encontrar ni “Las horas”, ni “Anima Mundi”, ni “La sombra del viento”, que eran mis tres opciones para Fabu :(
15:45, partida. Tantos recuerdos de partidas.
Claro, cuando juraba que nunca más un micro, y que por los siglos de los siglos el avión sería la única opción. Hay juramentos que no se deberían jamás hacer ;)
Y acá estoy, tan sobre la marcha! con vacaciones en enero (casi nunca) suelo ser de las que optan por diciembre o marzo. Y voy desde esta otra selva hacia la de ella. Y como no podía fallar –no falla jamás- no encontraba mi DNI que sólo apareció 10’ antes de abandonar mi house. Ah! Y a Coral, porque desde hace dos días Coral está en Rochies' house.
Y fueron días de estrés de escozores e intranquilidades varias -que ya casi ni recordaba- de monotema multiplicado, de las cero ganas de volver y de las grandes posibilidades de aún necesitarlo ...
Y ya sé que le otorgué un poder, un poder que no da otorgarle ni a el ni a nadie. Pero se trata de períodos, de tránsitos. Hoy justamente hablaba de eso, de tránsitos. Me encontré haciendo terapia astrológica como jamás antes o como aquellos tan jamases que ya ni recordamos. En casa de herrero ...
Y serán seis días, el miércoles estaré nuevamente aquí, con Coral? Para volver a empezar. Para seguir luchando, para decidir en que creer, para tal vez quitarle el poder y que ochocuartos. Que es la oportunidad de probar tantos otros caminos, que porque “casarnos” ? como este que voy a emprender ahora, que está buenísimo, insolitamente buenísimo, que quien lo hubiera pronosticado ...
Un campo de girasoles, un buen libro, el aroma de las flores, una siesta, el sonido del mar, la frescura del pasto, la brisa en la cara, reir. Pequeños placeres.
Y así me recibió LAN y como jamás también pude cantar PRI y como sucede a veces por azar nadie a mi costado. Y trato de recordar como conocí a Faby y remarco que más que seguro, que se trató de una tarde de office, donde seguramente nada indicaba que algo iba a pasar. Donde se suceden intermitentemente las horas, trabajando (?) buscando, leyendo, devorando páginas de otros. Seguramente me gustó algo de todo lo que leí, si, porque recuerdo que el linkeo fue inmediato ...
Después vinieron las coincidencias, la sincronicidad de hechos, las situaciones comunes. Así llegó, ahora está.
Compartimos tan solo horas donde también eligieron estar Uma y el, y partimos hacia aquella inauguración de house, y era tanto el ruido y tantas las estrellas ... que tal vez no daba estar. Solo por eso, porque se trataba del primer día, de la primera charla no leída ...
Más allá de las nubes y la magia de volar, haber tocado tierra en menos de dos horas, allá y acá, y un mundo de uniformes y sonrisas que en nada parece anticipar lo que nos tocará afrontar.
Porque irónicamente se trata de todo lo contrario. De lo salvaje, lo natural. Porque se trata de eso, de desestructurar.